jueves, 13 de noviembre de 2014

No más

Me levanté, como cada día, cuando él ya se había ido. Frente al espejo limpié los restos de la sangre seca que aún quedaban en mi cara. Me maquillé intentando eliminar las marcas que la cubrían. Pronto me quitarían la escayola del brazo izquierdo, pero no era por ella el dolor que sentía, tal vez no sería la última, sabía que la sucederían otras. En mi cabeza todavía resonaban los insultos de la última noche. Intentando evadirme de la realidad puse la radio. La canción de Bebe, Malo Eres, sonaba con fuerza. Por primera vez escuché su letra detenidamente. Preparé las maletas y hui. De ello hace más de cuatro años y no he vuelto a sentir dolor.

No hay comentarios:

Publicar un comentario