lunes, 26 de noviembre de 2018

La huida

Llegó el día, se decidió. Se subió a la pasarela. “Seria, sensitiva, irritada..” soy valiente -se dijo-.

El aplauso al unísono, le devolvió la sonrisa al rostro teñido sin maquillaje y lentes sin monturas. Pensó en el estilista que la vistió, era conservador. ¿Le gustará el estilo? Lo dudo –dijo su interior-. Y caminó…con el traje de armadura, sin moretta y sin hueso, pisando el vidrio endurecido de las lágrimas.

Llegó al final… luces, nervios, ruido, público. Fin de la alfombra, se volvió y exclamó: aliada vulnerabilidad.

No hay comentarios:

Publicar un comentario