miércoles, 4 de diciembre de 2019

Y de repente una sombra

La mujer lavaba los platos. En un momento dado, vio pasar una sombra por el pasillo.

La mujer tembló de miedo. Habían pasado dos días desde que dejó a su marido. Fue al salón, y allí estaba su hija. La madre le preguntó si había ido al baño. 

_No_ contestó la hija.

La madre se fue a la cocina. Por el rabillo del ojo izquierdo espiaba la puerta abierta que daba al pasillo. De repente, volvió la extraña sombra, y a ella se le escurrió un vaso, que se rompió en pedacitos.

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