miércoles, 11 de noviembre de 2015

Quiero que sepas

Quiero que sepas, que nunca ganaste. Ni cuando nos viste llorar, ya que decidimos que por cada lágrima, crearíamos dos carcajadas. Cuando nos viste hincar la rodilla, no caigas en la confusión, no era más que un impulso para volar más alto. No creo que seas consciente de la coraza que conseguiste crear, pero si existe algo que tenga que agradecerte, es eso. Intentaste rompernos, sin saber que estábamos construyendo algo indestructible, fuera de tu alcance, de tu simplicidad. Aún cuándo intentabas convertir en jirones la fina tela de la felicidad, tejimos una nueva, a base de retales hechos de sonrisas y del amor que solo una madre sabe crear. Quiero que sepas que, a pesar de ti, somos felices.

No hay comentarios:

Publicar un comentario