Victimario

- ¿Sabes? Mi madre nunca me quiso, por eso te pego. Fui un niño criado en el despego, desgarbado y debilucho del que todos se rieron, por eso te hiero. Mi padre bebía aun más que yo y tú me obligas a que lo haga con tus reproches. Las mujeres de hoy creéis saber más que los hombres, por eso te freno. El mundo está loco, lleno de violencia y perversión y yo, te protejo. A cambio solo te pido que me ames como yo quiero y eso que estás gorda y me irritas.

- ¿Es tan difícil? Yo no tengo nada contra la mujer, pero tú… ¡Si me dejas, yo…!

- Y ahora, ¡vamos!, espabila y prepárame la cena.